En 2017, el IRD implementó la nueva estrategia de fortalecimiento de la valorización social de la investigación, en línea con su Contrato de Objetivos y Rendimiento (COP), en sus distintas dimensiones:
El COP2016-2020 prevé la reorientación de la estrategia de valorización de la investigación, con el fin de lograr una mayor coherencia con las misiones del Instituto. Ahora, se da prioridad a la valorización social de la investigación y su contribución a la invención de soluciones, en una gran variedad de formas, para un futuro sostenible.
La primera piedra de esta estrategia es la reforma de la política de propiedad intelectual, reflexión en la que intervienen actores internos (investigadores, responsables de valorización, juristas) y socios del Instituto. Este proceso culminará en 2018 con la adopción de una estrategia renovada.
Dentro de este marco, se está revisando el objetivo de optimización de los registros de patentes, haciendo hincapié en la protección de la propiedad intelectual caso por caso, solo cuando se justifique.
Así, se está llevando a cabo una importante racionalización progresiva de la cartera del IRD, que hoy cuenta con 69 familias de patentes (frente a 116 en 2016).
En 2017, se firmaron acuerdos de licencia con cinco empresas, incluyendo una empresa de aceleración de la transferencia de tecnologías (SATT).
Cada vez son más los investigadores que se basan en colaboraciones para culminar sus trabajos de investigación. Ya sea con firmas industriales, ONG, emprendedores, asociaciones profesionales o fundaciones empresariales, estas alianzas abarcan las temáticas de los cinco departamentos científicos.
En 2017, el IRD firmó cinco contratos marco con empresas, centrándose cada vez más en formas de colaboración a largo plazo, en pos de la creación de nuevos modelos económicos sostenibles, con temas de investigación planteados en conjunto y relaciones cercanas entre los socios que conduzcan a mejores resultados.
Los Campus de innovación para el planeta son proyectos que abren la investigación a la sociedad y a los ecosistemas de innovación, dirigidos por el IRD y sus socios del Sur. Su objetivo es reunir a los actores del territorio (gobierno, actores privados, público, sociedad civil, artistas) para poner en común sus conocimientos y habilidades, ofreciendo así un terreno fértil para la creación y el apoyo de innovaciones que respondan a los desafíos territoriales.
Después de los Campus de Bondy y Dakar, lanzados en 2016, el Campus de Uagadugú se inauguró en octubre de 2017.
Más de un centenar de creadores de empresas innovadoras de diversos orígenes cuentan hoy con el apoyo de los distintos dispositivos concebidos y puestos en marcha gracias al IRD: incubadora Bond’Innov (Francia), iNCubateur de Numea (Nueva Caledonia), el nuevo programa de ayuda a la creación de empresas innovadoras en África (MeetAfrica) y ayuda interna a la creación de empresas.
